martes, febrero 21, 2006

CORTESÍA

¿Sabrían apagar un fuego con un extintor?, ¿y realizarle los primeros auxilios a una persona insconciente, a la que le falte la respiración y no tenga pulso?

Esto y mucho más es lo que está dando de sí el curso de OPERADOR DE PLANTA QUÍMICA (OPQ para los amigos) que estoy cursando. El miércoles tenemos que madrugar una horita más para que nos midan para podernos dar un traje a medida para cuando tengamos que hacer las prácticas en planta dentro de un par de meses.

Estoy bastante entusiasmado con el curso, con los proyectos creativos que tengo en proceso con varios amigos y con cómo me van saliendo las cosas últimamente. La vida hay que mirarla con una sonrisa para que ella, espejo de nuestra vida, nos sonría. Y es lo que está haciendo conmigo a grandes rasgos. A veces un nubarrón se posa sobre mi cabeza y me asusto, y esa tristeza o miedo me agrega aún más miedo o tristeza en el cuerpo. Aunque por poco tiempo...

El jueves pasado me comencé a leer EL CÓDIGO DA VINCI de DAN BROWN del que todo el mundo habla tan bien. Lo cierto es que no soy nuevo en el mundo de la lectura de libros del escritor americano ya que ÁNGELES y DEMONIOS me fascinó y quería no ser el único que no se hubiera leído el primer best seller del americano cuando proyectaran la película en los cines.

Y como quiero hacer ver que soy una persona cortés os dejo con un poema que escribí poco más de mes y medio. Se llama CORTESÍA y dice así:


Hola



Es cuestión de cortesía
cederle el paso al que contigo camina
pero después llega.

Tenderle la mano
a un entrevistado
o al entrevistador.

Dar dos besos a toda chica
que no conozcas y esté
entre tú y tu camino.

Presentarte a los amigos
de tus amigos.

Darte por desinteresado cuando
trates temas que a los demás
no les interesa que sepas.

Interesarte en cambio por todo
lo que nadie pensaría jamás
que podría interesarte y
tenderles la mano y un hombro
donde poderse apoyar.

Desearle buenas noches
hasta a la persona que llegarías
a asesinar entrada la oscuridad.

Si te golpean en una mejilla,
decir con buenas palabras que será
la última bofetada que recibas
y contenerte de devolverle con creces
el palo que te hayan dado.

Cortés es el que saluda y se despide
con un hola y un adiós
acompañado de una sonrisa.

Adiós

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Ay amigo!!! y qué pasa cuando la vida, cual gamberro, se te revela y te rompe los piños cuando vas sonrisa en ristre???...
¿Cómo se supone que debes reaccionar?

Saludines.

Anónimo dijo...

Sencillamente genial, si señor!!! La cortesía, un don que le haría falta a más de uno/a y que, desde luego, no estaría de más como asignatura en el cole. No es lo mismo que te saluden con un simple "hola" a que te regalen una sonrisa y una mirada agradable cuando te lo dicen, no tiene ni punto de comparación. Por eso animo a todo el mundo a que incluya este en su lista de valores.
Pronto tendremos un poeta escondido bajo el uniforme de operador de planta, esperemos que siga deleitándonos con sus líneas. ¡Mucha suerte!

Besos dulces.

Anónimo dijo...

Para LAGRANCHULA: Si la vida nos rompe los piños podemos comprarnos unos postizos y seguir sonriendo. La sonrisa exterior que realicemos nada tiene que ver con la sonrisa interior que queremos exteriorizar, que es la que que cuenta.
Para La princesaRosa: poeta... sí, aficionado... ¿operador de planta?, técnicamente lo seré cuando termine el curso, de ahí a que me cojan...ufff, que lejos lo veo aún.

Loli dijo...

Corteses, deberíamos ser todos. Ya que al no ser así nos llevamos la peor parte xD

Raúl dijo...

"Desearle buenas noches
hasta a la persona que llegarías
a asesinar entrada la oscuridad"

(ja ja ja)

Saludos,

Anónimo dijo...

Muchos corteses ya no saluda por cortesia, si no por costumbre.
Muy bueno tu poema.