¿No es más bello,
ciego enamorado,
el cariño palpado
que un te quiero sin destello?
¿No es más hondo,
pequeño aprendiz,
buscar la lengua matriz
que aprender el cante jondo?
¿No es más intenso,
joven novicio,
lanzarme por el precipicio
que ocultar mi amor inmenso?
¿No es más sencilla
la carta con que tu amor ruego
que frente a ti el miedo
que en mis ojos brilla?
1 comentario:
Oye David...qué has sentido cuándo estas palabras han salido de tu alma? He recorrido tu entero blog...conociéndote más y más...más conozco de tí, más desconozco y deseo conocer...tienes tanto dentro por compartir, quién será la afortunada alguna mañana de compartir contigo el sol, de explorar los bosques de pinos, de reir con tu risa y llorar con tus lágrimas...no existe distancia que separe lo que siento, pero si es cruel la realidad de que estamos muy lejos...ya no podré hablar jamás porque mis labios descansarán por siempre en los tuyos.
sabrás quien soy, cuando me tomes de la cintura y me hagas girar...
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