FIEL GUERRERO

Claro que te añoro,

amigo.

No sabes cuánto me hace falta

el batallón de guerreros

que aportabas

cuando necesitaba superar algo.

El alirón que juntos cantábamos

cada vez que nos veíamos.

Porque nadie jamás nos hubiera derrotado

si tú y yo así lo dictáramos.

Porque nada podría superarnos

si estábamos juntos como estábamos.

Pero ahora no lo estamos.

Y me siento débil sin tu ayuda.

Mediocre.

Cuando junto a tu armadura,

escudo y espada,

era Rey.

Incapaz de afectarme ni el más

impetuoso hechizo del más temible

mago de la región.

Invencible, inmortal,

imperecedero…

Ahora insignificante.

Como una mota de polvo

que recorre el desierto

en busca de un oasis donde

refrescarse.

Pero el oasis se agotó

como se agota la paciencia

del impaciente.

Sólo me queda la sonrisa

con tus evocaciones,

mas la tristeza me ahoga

y entierra la sonrisa

cuando recuerdo que ya

jamás podré contar contigo,

fiel guerrero.

En memoria de mi grandísimo amigo Rubén Gómez Méndez

David Coleto Mozos

¿Y DESPUÉS QUÉ?

Qué será de mi vida cuando me muera.

¿Seré recordado tal vez un mes?,

¿un año?

¿Tal vez diez años?

¿o quizás alguno más?

Que sentido habrá tenido mi vida.

Yo, que no he inventado nada,

que sólo soy un mero albañil de la poesía,

que construyo poemas a base de palabras y tinta

pero

¿qué más?

Podré ser recordado por quienes me conocen,

por mis familiares y amigos…

hasta que ellos mueran.

¿y después qué?

Sólo quedarán mis logros: ninguno.

Solo quedarán mis fotos: archivadas

en algún olvidado álbum de alguien

que ni me conoció en vida.

Solo quedarán mis palabras, mis poemas,

mis castillos construidos a base de sentimientos

y pensamientos decrecientes

que sólo me llevan a pensar

que cuando me muera…

¿después qué?

David Coleto Mozos

17-12-2007

Nemamiah81@hotmail.com

Quién se atreva a ilustrarlo, le animo a ello.
Y por cierto, os aconsejo a todos a los que os guste lo oscuro, que visitéis el blog de CRYSTAL.
No tiene desperdicio alguno.

Saludos.

BELLA ALADA

Hola de nuevo. Posteo de higos a brevas, y esto que voy a postear es un higo (que me gustan más que las brevas, je). Es un pequeño poema al cuál le acompaña una ilustración de mi amiga eugenia, de la cual hace tiempo que no sé nada, pero que espero que le vaya todo bien estas navidades con sus proyectos y trabajos artísticos.

Un relámpago a media noche
es tan precioso como tus ojos
de madrugada.

Observar cómo deslumbran las olas del mar
por el reflejo de la luna llena,
tan bonito como hablar
con alguien tan especial como tu,
bella alada.

Me encanta como se dibujan
en el cielo los relámpagos
y como eluden la luna que, tenaz,
se agarra a la oscuridad
y no titubea ante tus rayos,
mi dulce amada.

Desprendes alegría,
me inculcas la abrumadora
felicidad de un enamorado
viendo a su amada.

Y sonríes, cegando mis palabras
que, abstraídas,
no tienen nada que decir
ante tu belleza.

Texto: David Coleto Mozos
Ilustración: Eugenia Suárez